Hagámonos cargo de la ciudad en que queremos vivir

 

Es momento de que los ciudadanos de Viña del Mar y Concón nos hagamos cargo del lugar en que queremos vivir

Hace algunas horas se abrió en el sitio web del Sistema Nacional de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) el proceso de calificación del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto de edificación Alto Santorini de la inmobiliaria Vimac, que involucra la construcción de dos mega torres (Alto Santorini I y II) a centímetros del Campo Dunar de la Punta de Concón.

En esta calificación del Estudio de Impacto Ambiental pueden participar todos los ciudadanos, personas jurídicas y naturales, entregando sus observaciones por escrito ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA). El Estudio de Impacto Ambiental concluirá con una Resolución de Calificación Ambiental (RCA), que puede ser de aprobación o rechazo.

¿Que es la RCA?

La Resolución de Calificación Ambiental o RCA es la autorización que entrega el Servicio de Evaluación Ambiental a determinada construcción, un documento administrativo que se obtiene una vez culminado el proceso de evaluación del Estudio de Impacto Ambiental. En la RCA se establece si el proyecto presentado ha sido aprobado o rechazado (RCA Favorable o Desfavorable). Cabe destacar que la ciudadanía dispone de 60 días hábiles para presentar sus observaciones respecto al EIA.

 

Hora de la participación ciudadana

El abogado de Duna Viva, Gabriel Muñoz es enfático al reconocer lo fundamental de la presencia comunitaria en este tipo de procesos, afirmando que “es muy importante que se genere una participación ciudadana coherente, efectiva y consistente (…) creemos que las observaciones del Estudio de Impacto Ambiental tienen que ser tan relevantes que la inmobiliaria Vimac jamás pueda a lograr una RCA.

El profesional además agrega que “buscamos que se haga efectivo el concepto de democracia ambiental, para que todos los habitantes de Viña del Mar y Concón que se sientan afectados en la destrucción de las dunas puedan hacer sus observaciones técnicas, paisajísticas, ambientales y de biodiversidad en relación a lo que genera esta obra”.

Un importante aliado en la promoción y difusión del cuidado de las dunas es la Corporación Pro Defensa del Patrimonio de Viña del Mar, quien a través de su vocero Hernán Madariaga reafirma lo elemental de la participación ciudadana en este contexto, “nos hemos contactado con Duna Viva para aunar fuerzas, conociendo la inviabilidad del proyecto y con el claro propósito de ejercer una protección efectiva de nuestro patrimonio natural. Las dunas aún subsisten en un pequeño porcentaje de Viña del Mar y como viñamarinos debemos involucrarnos en su protección, hacemos un llamado a la comunidad a dejar sus reparos sobre el Estudio de Impacto Ambiental”, declara.

La inmobiliaria Vimac comenzó la construcción del proyecto Alto Santorini a mediados de 2018, luego como agrupación Duna Viva impusimos un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso, que posteriormente declaró ilegal la obra y detuvo los trabajos en mayo de 2019, orden que aún se mantiene vigente. La constructora solo alcanzó la edificación de 4 pisos de una de las dos torres en cuestión.

Uno de los elementos esenciales de un EIA es lo que se denomina, según la Ley nº 19300 sobre las Bases Generales del Medio Ambiente, como línea de base, esto se define como la descripción detallada del área de influencia de un proyecto o actividad, en forma previa a su ejecución. Muñoz lo explica de modo más acotado y simple “es una especie de fotografía ambiental de lo que había antes de la intervención de la inmobiliaria o del titular del proyecto”.

Nuestro abogado complementa la información añadiendo que “Vimac presentó con fecha 1 de junio la postulación de EIA, trámite que la Corte Suprema y Corte de Apelaciones de Valparaíso había ordenado realizar”, el problema está en que la inmobiliaria intervino sin tener línea de base, simplemente no se sabe qué había con anterioridad a la destrucción del campo durar. Ellos están funcionando sobre un supuesto falso porque tendrían que desconocer el avance en las obras y eso es jurídicamente imposible… la destrucción ya fue hecha”, afectando directamente las pretensiones de la inmobiliaria en el EIA.

Finalmente el llamado es a que la comunidad de Viña del Mar y Concón pueda participar activamente de las observaciones que sean necesarias para impugnar este proyecto y alejar la depredadora actividad de las inmobiliarias del Santuario de la Naturaleza. Es momento de que los ciudadanos se hagan cargo del lugar en que quieren vivir.

 

Revisa el Estudio de Impacto Ambiental y deja tus observaciones en: https://tinyurl.com/ydhsht3l.

Duna Viva, organización para la conservación del Campo Dunar de Concón.